LA DINAMICA FAMILIAR
CONSTELACIONES FAMILIARES
Cada vez voy buceando
más y cada vez voy comprendiendo más las diferentes dinámicas que se han ido
moviendo y que se siguen moviendo dentro de mi sistema familiar de origen (la
familia en la que yo he nacido, ancestros incluidos), “afectando” mi libre
albedrío.
En la medida en que las
voy descubriendo, hago el trabajo para “reparar” lo que corresponda y sanar. De
esta manera, me voy librando de una gran mochila que, inconscientemente, he
llevado durante muchos años en mi espalda, y que de alguna manera me impedía
ser quien realmente soy y disfrutar de una vida plena. A fin de cuentas, todo
el camino es un aprendizaje y un auto descubrimiento.
Nacemos dentro de un
sistema familiar, y todas las vivencias, de todas las personas que forman parte
del sistema (hayamos conocido o no a esas personas), que emocionalmente no
hayan sido “bien vividas” y “bien cerradas”, siguen afectando a posteriores miembros
venidos al sistema, es decir, a los que nacen después.
Un niño actúa desde el
amor, e inconscientemente, puede llegar a hacer cualquier cosa por su sistema
familiar, incluso dañar su vida o perderla. Por muy raro que pueda
parecer, esto es así.
La mayor parte del
tiempo (aproximadamente un 90%) funcionamos desde el inconsciente. Y es ahí
donde están grabadas todas esas vivencias.
Como nuestro cerebro
es holográfico, toda la información, de todo el sistema, está grabada en
nosotros. No sólo heredamos los rasgos físicos de nuestros padres, sino todas
las memorias de sus vivencias emocionales. A su vez, ellos las heredaron de sus
padres, y éstos, de los suyos. Así que todo eso está en nosotros.
Con todo esto, las
personas que han sido excluidas del sistema y aquellas a las que no se les ha
reconocido su lugar (abortos, expulsados, rechazados, asesinatos, violaciones,
suicidios, accidentes…), reclaman desde nuestro inconsciente familiar se les reconozca.
Y para ello, una
persona que nazca posterior a ellos, tomará para sí lo que esa persona no logró
cerrar adecuadamente, y repetirá de la misma manera o de una parecida, ese
mismo patrón. Si llega a ser consciente
de lo que está sucediendo, podrá hacer el trabajo adecuado y dejar en aquella
persona lo que era de ella, reintegrándola de nuevo en el sistema familiar, y así, liberándose de la “carga” (rompiendo el
“patrón”).
Del mismo modo, es muy
sanador reconocer y honrar a los padres. Ellos nos dieron la vida. El mejor
regalo que nos podían dar. Lo que hemos vivido a
partir de ahí, forma parte de nuestro aprendizaje.
He podido comprobar
que hay mucha gente a la que le cuesta mucho dar este paso, por resentimientos, rabia…
Y sin embargo, les animo a hacerlo. La sensación de paz que se siente una vez
se ha hecho, es inexplicable. Y la relación con nuestros hijos mejora
muchísimo. Lo digo por propia experiencia. Es un paso gigante en nuestro
caminar y en nuestra sanación. Por muy dura que haya sido la experiencia vivida
con ellos.
Esto es una invitación
a indagar en vuestro sistema familiar y, si está en vuestras manos, ir sanando
heridas pasadas, para liberaos y liberar a los que nazcan después de vosotros.
Disponemos para ello de la maravillosa herramienta, que son las “Constelaciones
Familiares”.
Gracias por compartirlo.